Esta receta de mini cheesecakes heladas que comparto con vosotros ha sido una sorpresa, un buen descubrimiento que no descarto repetir este verano. Es un postre saludable y muy sabroso, que ayuda a redondear una buena comida y sienta de fábula. Para la base, he utilizado avena y dátiles, pero se puede hacer con galletas y mantequilla. El relleno es queso crema 0%, tipo Philadelphia, y para acabar, por encima lleva mermelada sin azúcar. Sabroso, refrescante y saludable, ¿se puede pedir algo más?
Ingredientes (para 4-5 raciones individuales)
Para la base
-100 gramos de copos de avena
-100 gramos de dátiles
Para el relleno
-300 gramos de queso light tipo Philadelphia
-azúcar o edulcorante al gusto
Para el topping
-mermelada sin azúcar
Pasos
-empezamos picando un poco los copos de avena, sin que llegue a ser harina, y los reservamos
-picamos también los dátiles y mezclamos con los copos de avena que hemos reservado hasta que se integren. Podemos colocar esta mezcla dentro de un molde/cortador pequeño redondo y aplastamos para tener nuestra base, sino lo podemos colocar directamente en un vaso
-después, mezclamos el queso con un poco de azúcar o edulcorante y lo colocamos sobre la base que ya tenemos preparada en el molde/cortador o en el vaso
-por encima, le añadimos mermelada sin azúcar y retiramos el molde/cortador con cuidado. Si se ha preparado en un vaso, añadir la mermelada por encima directamente
-llevamos al congelador para que mantenga su forma
Consejo: sacar del congelador un rato antes de comer